En 10 días, tres obreros fallecieron mientras se encontraban realizando trabajos de construcción o de mantenimiento.
El último fue Guillermo Silva, de 38 años, quien murió aplastado cuando realizaba una demolición en Laprida y Rodríguez. Esta obra había sido denunciada horas antes por irregularidades, por parte de la Comisión Vecinal.
CARLOS ARRIGONI, delegado del Ministerio Provincial de Trabajo, responsabilizó al arquitecto a cargo de la obra, Edgardo Calvano, por lo sucedido.
El funcionario indicó que los controles se realizan, pero que es imposible estar en todas las obras. Agregó que son los responsables técnicos de los emprendimientos quienes deben cumplir con los requerimientos.
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